El pasado 30 de octubre, se llevó a cabo en la sala de Capacitación del Plantel de RECOPE, ubicado en el El Alto de Ochomogo, el foro «Fortaleciendo el control interno a través de la prevención de actos de fraude y corrupción» como parte de un programa que se ha venido desarrollando en el Sector Público y en el cual participan funcionarios que laboran en las dependencias, que tienen bajo su cargo la función de liderar y apoyar el fortalecimiento de los sistemas de control.
En esta oportunidad la sede fue RECOPE y estuvo liderado por la Unidad de Control Interno y Valoración de Riesgo de la empresa, en coordinación con el Dpto. de Comunicación y Relaciones Públicas.
La apertura estuvo a cargo de la Gerente General de RECOPE, Ing. Gabriela Montes de Oca, quien realizó una breve presentación de la Empresa y enfatizó el compromiso que la entidad mantiene por el fortalecimiento del control interno, como un mecanismo de mejora continua, que potencia el logro de los objetivos y que permite una apropiada rendición de cuentas.
Se contó con la participación de unos 50 funcionarios del sector público, entre ellos funcionarios del Poder Judicial, personal de la Procuraduría General de la Ética, Tribunal Supremo de Elecciones, Consejo Nacional de Rectores, Universidad de Costa Rica, Instituto Tecnológico de Costa Rica, Ministerio de Agricultura y Ganadería, Comisión Nacional de Emergencias, Dirección General de Migración y Extranjería, IMAS, INS, Instituto Costarricense sobre Drogas.
Además participó Ministerio de Hacienda, Mideplan La Dirección General de Migración y Extranjería y un grupo de funcionarios de RECOPE.
La capacitación, que se desarrolló de 9:00 a.m. a 12:30 p.m. e incluyó una charla sobre Riesgos, Fraude Empresarial y su impacto en la Administración a cargo del Lic. Edwin Granados, del INS, mientras que la Lic. Luz Argentina Zúñiga de la Procuraduría General de la Ética expuso sobre la responsabilidad penal según el tipo de acto indebido que hagan los funcionarios públicos y aquellos que son NO son funcionarios, pero comenten un acto de corrupción a través de un familiar.
Granados señaló que el fraude puede ser materializado por un empleado de cualquier nivel dentro de una organización, así como por cualquiera fuera de la empresa, indicó que las tres características comunes del fraude son:
1- Presión o incentivo, la necesidad del perpetrador satisfacerla por medio de una dádiva como producto del fraude.
2- Oportunidad, la habilidad del perpetrador por cometer el fraude.
3- Racionalización, la habilidad del perpetrador para justificar el fraude por el o en su mente.
«Este tema de la corrupción es de todos, puede estar involucrado cualquier persona, ya que para que exista corrupción debe haber un corruptor» explicó el Lic. Edwin Granados. Además agregó que la mayoría de fraudes inician siendo pequeños actos, pero continúan creciendo hasta que se vuelven indetectables.
La Licda. Zuñiga por su parte indicó que el «Peculado” será reprimido con prisión de tres a doce años, y comprende a aquel funcionario público que sustrajere o distrajere dinero o bienes cuya administración, percepción o custodia le haya sido confiada por razón de su cargo. La representante de la Procuraduría de la Ética, además del peculado, trató temas como el cohecho, enriquecimiento ilícito, receptación, legalización o encubrimiento de bienes entre otros.
Los participantes comparten en estos foros experiencias sobre novedades y mejores prácticas, que nos permiten hacer un mejor aprovechamiento de los recursos públicos.
Para la Ing. Montes de Oca, la agenda presentada se considera muy acertada, de cara al compromiso que tiene la Administración para llevar adelante la implementación de mecanismos apropiados, que aseguren el buen uso de los recursos públicos, fortalecer el cumplimiento de la misión que nos ha sido encomendada y promover la transparencia, para con una sociedad cada vez más demandante en el tema de rendición de cuentas.