Petróleo a 54.30 dólares por barril
Los precios del petróleo caen porque los escasos detalles sobre la primera fase de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China debilitaron el optimismo de la semana pasada, que generó alzas en el mercado del crudo. El referencial internacional Brent baja 1.12 dólares, o 1.85 por ciento, a 59.39 dólares el barril, mientras que el West Texas Intermediate de Estados Unidos (WTI) cedía 1.02 dólares, o 1.86 por ciento, a 54.30 dólares el barril. Estados Unidos y China acordaron la primera fase de un pacto para poner fin a su guerra comercial, lo que llevó al presidente Donald Trump a suspender un alza de aranceles, pero las tarifas existentes siguen vigentes y funcionarios dijeron que se necesita más trabajo. «El mercado petrolero está tomando una postura cautelosa sobre lo que viene, dado que no se abordaron los temas complicados de la política industrial, los derechos de propiedad intelectual, la transferencia de tecnología, entre otros», dijo Harry Tchilinguirian, estratega de BNP Paribas.
En Ecuador: Gobierno e indígenas ponen fin a las protestas con un acuerdo que derogó el polémico decreto que elevó el precio de los combustibles
ECUADOR. El gobierno de Ecuador puso fin a la violenta crisis de casi dos semanas mediante un pacto entre gobierno e indígenas que revoca la eliminación de subsidios al combustible que había sido pactada con el FMI. Después de más de cuatro horas de negociación con la mediación de la ONU y la Iglesia católica, las dos partes asumieron un compromiso que atiende la exigencia del movimiento indígena: la derogatoria del decreto que había liberado el precio del diésel y la gasolina, encareciéndolos hasta en 123 por ciento. Ríos de gente, en un alto número indígenas que se habían manifestado durante toda la semana, se volcaron a las calles de Quito para festejar, pese al toque de queda impuesto por el presidente Lenín Moreno a raíz de los fuertes disturbios de la víspera. También hubo fuegos pirotécnicos en los exteriores del Ágora, el coliseo donde se concentraron los aborígenes que habían llegado a la capital en una movilización respaldada por estudiantes y algunos sindicatos.
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Agencia de Estados Unidos reconoce su error: México no importó crudo en julio y agosto, lo que confirma la intención del gobierno de poseer soberanía energética
El reconocimiento por parte de la Oficina del Censo de Estados Unidos de que México no importó crudo de su vecino norteño, confirma hoy la intención del gobierno este país y del Presidente Lopez Obrador de poseer soberanía energética. Tras la publicación del informe de agosto de 2019 sobre el comercio internacional de bienes y servicios de Estados Unidos, la Oficina del Censo identificó un informe erróneo de las presentaciones de exportaciones de crudo a México y determinó que las correcciones a sus datos eran necesarias, según reveló el comunicado del organismo. Así, pocas horas después de que la entidad afirmara que México importó aproximadamente 533 mil barriles de crudo de Estados Unidos en julio y otros ocho mil 962 en agosto, quedó desmentida la información. Ya lo había advertido antes la Secretaría de Energía de la nación mexicana (Sener) en un comunicado posterior a la divulgación errónea de los datos, cuando enfatizó que desde enero ese país no importa petróleo procedente de Estados Unidos. Cabe señalar, que en esta administración (?) la empresa productiva del estado Pemex no ha importado petróleo, remarcó la secretaria de Energía, Rocío Nahle. Igualmente, puntualizó, el Gobierno Federal trabaja en una política energética para aumentar la producción de hidrocarburos y con ello abastecer el Sistema Nacional de Refinación, y cumplir con la comercialización de los compromisos internacionales pactados. A finales de septiembre, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, anunció en conferencia de prensa que en ese país se detuvo la caída en la producción de crudo y es firme la recuperación de la empresa estatal Petróleos Mexicanos, o Pemex. ‘Cesó el descenso en la extracción que se inició hace 24 años y que hizo crisis en 2018 cuando se perdieron 200 mil barriles diarios. Así nos entregaron el gobierno, con baja en la extracción y una tendencia negativa hacia la desaparición’, sentenció el mandatario.
El presidente ruso Vladimir Putin llegó este lunes a Arabia Saudita para confirmar sus coincidencias con Riad en materia petrolera, pero también intentará influir para rebajar las tensiones en el Golfo entre sauditas e iraníes
Riad (AFP). Vladimir Putin llegó este lunes a Arabia Saudita para confirmar sus coincidencias con Riad en materia petrolera, pero también intentará influir para rebajar las tensiones en el Golfo entre saudítas e iraníes. El dirigente ruso, cuyo avión aterrizó en el aeropuerto de Riad a las 10H35 GMT, fue recibido con una salva de cañonazos. El rey Salmán debía ofrecerle una recepción solemne, previa a una reunión bilateral, según el Kremlin. Arabia Saudita, líder en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y Rusia -que no pertenece al cártel- han cooperado estrechamente en los últimos años para limitar la oferta de oro negro e intentar hacer que remonten los precios. «Vamos a trabajar con Arabia Saudita y con nuestros otros socios y amigos en el mundo árabe […] para reducir a cero cualquier intento de desestabilizar el mercado» petrolero, afirmó Putin en una entrevista con canales de televisión en árabe, difundida el domingo. Otra cuestión que debería estar sobre la mesa son las relaciones entre los archienemigos Arabia Saudita e Irán, un país aliado de Moscú. La tensión entre sauditas e iraníes no dejó de aumentar, sobre todo desde los ataques contra unos yacimientos petroleros saudíes en septiembre, que Riad y Washington imputaron a Irán -algo que Teherán negó-. Los ataques fueron reivindicados por los rebeldes hutíes de Yemen, a los que la República Islámica apoya. En aquella disputa, Rusia declinó posicionarse pero propuso venderle misiles a Riad para defenderse, al tiempo que descartó extraer «conclusiones apresuradas» contra Irán. «Una potencia tan grande como Irán no puede dejar de tener sus propios intereses […], y hay que respetarlos», insistió Putin en su entrevista con los canales arabohablantes. «Haremos cuanto podamos para crear las condiciones necesarias para una dinámica positiva» que sirva para rebajar tensiones, subrayó. Durante la visita se firmarán una treintena de acuerdos y contratos, incluyendo una decena en el sector de la alta tecnología por más de 2.000 millones de dólares. Después de Arabia Saudita, Putin viajará el martes a Emiratos Árabes Unidos.
