- Este proceso supone la eliminación de 4 dependencias y la fusión de 2 de ellas.
- Recope iniciaría la revisión de los perfiles profesionales especializados, acorde a la nueva estructura organizacional.
En una conferencia de prensa celebrada esta mañana, el presidente de Recope, Juan Manuel Quesada, y la gerente general, Karla Montero, anunciaron importantes avances en el proceso de reorganización de la empresa, con el objetivo de elevar su eficiencia y adaptarla a los desafíos actuales del abastecimiento de combustibles en Costa Rica.
Desde el inicio de esta administración, Recope ha centrado esfuerzos en establecer un modelo organizacional idóneo para garantizar el abastecimiento oportuno y seguro de combustibles en el país. Este proceso, iniciado en agosto de 2023, ha alcanzado una etapa crucial con la presentación de una propuesta técnicamente rigurosa tras cuatro meses de análisis exhaustivo.
“Esta propuesta no es el resultado de un pronunciamiento antojadizo por parte de esta presidencia ni de la Junta Directiva, sino que está basada en un análisis técnico que tuvo a la vista, no solo lo que Recope hace bien, sino lo que podría hacer mejor”, mencionó Juan Manuel Quesada, presidente de Recope.
La propuesta, fundamentada en análisis de datos y una recopilación de las mejores prácticas de los líderes internacionales en la industria de combustibles, fue aprobada por la Junta Directiva de Recope el pasado martes 5 de diciembre. Para avanzar a la siguiente fase, la propuesta deberá pasar por evaluaciones del Minae y el Mideplan.
El plan de reorganización implica la eliminación de cuatro unidades y la fusión de dos departamentos, marcando un hito en la transformación de las operaciones de Recope. Este enfoque estratégico se alinea con los objetivos del Plan Estratégico Empresarial, buscando no solo mejorar las prácticas actuales, sino también identificar áreas de oportunidad para una mayor eficiencia.
“Esta no es una decisión fácil porque sabemos que detrás de cada empleado hay una familia y hay personas, pero es necesaria y prevalece el interés de la colectividad sobre cualquier interés individual y mezquino”, mencionó el jerarca.
Los ajustes estructurales aprobados permitirán afinar la calidad y cantidad de personal necesario para la empresa, con una revisión de perfiles profesionales para modernizar y profesionalizar aún más la organización.
Este proceso de reorganización posicionaría a Recope en la vanguardia de la eficiencia empresarial, asegurando su relevancia y capacidad para enfrentar los desafíos futuros en la industria de combustibles en Costa Rica. La empresa reafirma su compromiso con la excelencia operativa y contribución al desarrollo sostenible del país.