- CCSS, Hacienda, CNE y municipalidades recibieron fondos.
Recope contribuyó con más de ¢572.000 millones a instituciones públicas durante el 2022.
La Empresa de todos los costarricenses contribuyó al régimen de pensiones con más de ¢8.113 millones, que fueron trasladados a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
También, se depositaron más de ¢4.961 millones al Ministerio de Hacienda por concepto de impuestos sobre la renta, recursos que contribuyen para que las autoridades hagan frente a las necesidades prioritarias de Costa Rica.
Otra de las contribuciones fue a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), a la cual se le transfirieron más de ¢990 millones, recursos que se destinarán para la coordinación, prevención y atención de emergencias en todo el territorio nacional.
A las municipalidades de Goicoechea, Limón, Cartago, Alajuela, Puntarenas, Liberia y San José, cantones donde se ubican las instalaciones de Recope, se les trasladaron más de ¢4.225 millones correspondientes al pago de patentes.
Juan Manuel Quesada, presidente de Recope, indicó que “estas contribuciones son importantes y benefician a todo el país. Recope no debe perder de vista que su razón es y debe ser siempre la generación de beneficios para todos los costarricenses”.
Impuesto único a los combustibles
Por otra parte, Recope trasladó más de ¢553.987 millones por concepto del impuesto único a los combustibles, recursos que se destinan al: Ministerio de Hacienda, para hacer frente a las necesidades prioritarias del país;, Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), para mantenimiento de carreteras nacionales; municipalidades, para el mantenimiento de carreteras cantonales;, Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme), para supervisar la calidad de la red nacional; Fonafifo, para servicios ambientales; Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y Cruz Roja.
Quesada destacó “cómo no alegrarnos de ser parte de las soluciones a los retos del país mediante este tipo de contribuciones”.
El impuesto a los combustibles es la tercera fuente de ingresos tributarios más importante del Gobierno, después del impuesto de renta y del impuesto al valor agregado (IVA).
