29 de setiembre, 2017
Como parte de su programa de compensación social, RECOPE reconstruyó la escuela rural La Islita, ubicada en La Flor, un pequeño asentamiento entre los manglares de la desembocadura del Estero de Puntarenas. Se trata de una porción de tierra habitada por unas 70 personas, quienes subsisten de la pesca y extracción de moluscos.
La entrega de las obras a la comunicad se realizó este 29 de setiembre durante una ceremonia presidida por la jerarca de RECOPE, Sara Salazar, acompañada por el Presidente de INCOFER, Gustavo Meneses. Las mejoras efectuadas en el centro educativo tuvieron un costo total de ₡11,5 millones.
Sara Salazar Presidenta de RECOPE
Esta escuela fue construida en el año 2006 y es de modalidad unidocente. Cuenta con nueve niños de primaria y seis de kínder. La edificación tiene aproximadamente 135 metros cuadrados y está conformada por un salón de clases, el servicio sanitario, la oficina administrativa y la bodega.
Se sustituyerontodas las láminas que presentan corrosión y daño. Se utilizaron láminas esmaltadas para proporcionar mayor duración y resistencia a las condiciones climáticas.
Además, se usó material aislante térmico entre el techo y el cielo raso, tipo prodex para mejorar el confort del lugar. En el caso de los bajantes se colocaron las piezas faltantes y se sustituyeron las canoas por esmaltadas.
Se cambiaron las láminas de fibrolit sobre vigas de madera que se encontraban dañadas; y se cambió el piso cerámico por otro antideslizante.
Se retiraron los servicios sanitarios y el área de ducha del interior del edificio de la escuela, y se colocó una batería de dos servicios sanitarios, una ducha y un área de dos lavatorios en la parte externa.
En el área interna donde se encontraba el servicio sanitario se adecuó para ser utilizada como cocina-comedor, pues anteriormente los utensilios de cocina se usaban en el salón de clase.
Un ingeniero eléctrico revisó la instalación eléctrica y se procedió a realizar las mejores correspondientes. Por otro lado se renovaron las baterías de los paneles solares y todos quedaron nuevamente en funcionamiento.
Para el sistema de tratamiento de aguas negras se hizo el diseño especial por un ingeniero civil, contemplando las características del lugar, dado que al ser una isla no es posible estar realizando limpiezas y retiro de los lodos sépticos.
RECOPE ha trabajado de forma mancomunada y en sinergia con la Red institucional y Comunal Pro Puntarenas, a favor de esta comunidad, donde también se efectuó una limpieza de playas el pasado 27 de julio y se ha capacitado a los habitantes sobre manejo de desechos y cuidado del medio ambiente.
Esta tarea de compensación social está vinculada el proyecto de medición automática de tanques que se desarrolla en el Plantel de Barranca.