Como parte de la lucha frontal que mantiene Recope en contra del robo de combustible, la empresa cuenta con un equipo especializado en criminología, que ha permitido dar con delincuentes dedicados al robo, transporte, almacenamiento y venta ilegal de combustibles en el país.
Producto de las investigaciones realizadas por el equipo especializado de Recope, esta mañana en conjunto con el OIJ, se allanó un predio en el Coyol, Alajuela, donde un grupo delictivo, al parecer, sustraía combustible del poliducto, lo almacenaba en tanquetas y lo distribuía en camiones.
Esto es parte de la operación de investigación denominada “Línea 7”, que permitió detener ayer un camión y aprehender a su conductor, quien transportaba 12 tanquetas con aproximadamente 12.000 litros de combustible que, presuntamente, fue robado.
El sitio del allanamiento cuenta con una bodega y, según las pesquisas realizadas por el personal de Recope desde enero pasado, durante las madrugadas se llenaban las tanquetas y, después se presume que se distribuían en camiones.
Juan Manuel Quesada, presidente de Recope, manifestó que “mantenemos una lucha frontal contra el robo de combustibles. Esto es parte de los esfuerzo que estamos realizando para cuidar la plata de todos los costarricenses. No hay que perder de vista que este tipo de delitos no solo tiene impacto económico para el país, sino que también contamina el ambiente y, lo que más nos preocupa, es que pone en riesgo la vida de las personas, por eso es que no vamos a descansar en esta lucha”.
Ante cualquier sospecha de robo, transporte, almacenamiento o venta ilegal de combustibles, los costarricenses pueden realizar una denuncia confidencial a la línea telefónica 1–0–0–2.
El robo de combustible es un delito que se castiga hasta con 15 años de prisión.